Una afirmación realizada casi al pasar por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, volvió a poner a Venezuela en el centro de la escena internacional y encendió especulaciones sobre una posible acción militar encubierta en territorio venezolano. En una entrevista radial concedida el viernes pasado en Nueva York, el mandatario aseguró que su país desmanteló recientemente una “gran instalación” vinculada al narcotráfico en Venezuela, aunque evitó brindar precisiones.

La declaración, realizada durante un diálogo con el empresario republicano John Catsimatidis en la emisora WABC, pasó inicialmente inadvertida. Sin embargo, cobró mayor relevancia luego de que el diario The New York Times la citara este domingo, lo que desató un aluvión de versiones y análisis en redes sociales y en ámbitos especializados.

Trump describió el operativo como un golpe “duro” contra una infraestructura desde la cual, según afirmó, salían embarcaciones relacionadas con el tráfico de drogas. “Tenían una gran planta, una gran instalación de donde provenían los barcos. La desmantelamos hace dos noches”, sostuvo el viernes, en lo que sería una referencia a un ataque ocurrido en la antesala de la Navidad.

Fuentes del gobierno estadounidense consultadas por el New York Times señalaron que el presidente se refería a una instalación de narcotráfico en Venezuela, aunque se negaron a aportar detalles sobre la ubicación, el método utilizado o el alcance de la operación. Tanto la CIA como la Casa Blanca optaron por no realizar comentarios oficiales.

Del lado venezolano, el silencio fue la respuesta predominante. Ni el presidente Nicolás Maduro ni el dirigente oficialista Diosdado Cabello se pronunciaron públicamente sobre las declaraciones, y hasta el momento no hubo reportes oficiales que confirmen un ataque estadounidense en el país. La ausencia de reacción alimentó aún más las dudas sobre lo ocurrido.

Nicolás Maduro

Analistas y periodistas señalaron una coincidencia temporal con un hecho registrado el 24 de diciembre en el estado Zulia, donde una explosión seguida de un incendio afectó a una empresa de productos químicos ubicada en la zona industrial de San Francisco, cerca de Maracaibo. 

Videos difundidos en redes sociales mostraron grandes llamaradas y explosiones secundarias, visibles a varios kilómetros. La empresa involucrada calificó el episodio como un “accidente industrial” y aseguró que no se registraron víctimas, aunque las actividades en el galpón afectado fueron suspendidas.

De confirmarse la versión de Trump, se trataría del primer ataque terrestre conocido contra una instalación en Venezuela desde el inicio de la actual campaña de presión militar impulsada por Washington. Estados Unidos acusa a Maduro de liderar una organización narcoterrorista conocida como el Cartel de los Soles, en un país que, si bien no es un gran productor de drogas, ocupa un rol clave como ruta de tránsito, especialmente de cocaína proveniente de Colombia.

En octubre, Trump ya había reconocido públicamente que autorizó a la CIA a planificar operaciones encubiertas dentro de Venezuela, sin especificar su alcance. Desde septiembre, además, fuerzas estadounidenses intensificaron su presencia en el Caribe y el Pacífico con el argumento de combatir el narcotráfico, y ejecutaron decenas de ataques contra embarcaciones que, según Washington, transportaban drogas.

Ayer, Maduro encabezó un acto televisado junto al ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, en el que destacó la lealtad de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana y evitó referirse directamente a los dichos del presidente estadounidense. Para algunos analistas, el silencio oficial busca evitar una escalada del conflicto o admitir vulnerabilidades en un contexto de creciente presión militar y económica.